Soy una verdadera amante de los gatos, hasta un nivel que mis amigos me llaman "gata". Desde muy pequeña siempre me he sentido atraída por los gatos y siento una conexión muy singular y única. Para mí son mucho más que mascotas, son una parte irremplazable de mi vida. Respecto a mi experiencia: ahora tengo una gata calico (8 años) y un gato Snowshoe (2,5 años), es decir que sé cuidarlos (día y noche), alimentarlos, llevarlos al veterinario, darles medicación, entretenerlos y darles mimos, siempre cuando quieran ellos, obviamente. He estado cuidando gatos de amigos durante muchos años, siempre con muchas ganas y paciencia.