NO HAY MEJOR HUELLA PARA EL CORAZON QUE LAS PATITAS DE UN PERRITO
|
Desde que era pequeña, he sentido un profundo amor por los perros. Ser cuidadora me permite compartir ese amor a diario, brindando a cada perro la atención y el cariño que se merece. Mi principal motivación es asegurarme de que cada perro esté feliz y saludable. Entiendo la importancia de proporcionarles ejercicio, socialización y cuidados específicos, y estoy comprometida a ofrecer lo mejor para ellos, Asimismo considero que los perros no solo son mascotas, sino compañeros leales que enriquecen nuestras vidas. Ser cuidadora me permite crear lazos especiales con ellos, proporcionando compañía y afecto en momentos en que sus dueños no pueden estar presentes. Agregando a ello, he sido voluntaria en refugios para animales, cuidando, alimentando y bañando a perritos.